Soy técnico en terapias asistidas con animales, educador canino y terapeuta Gestalt, especializado en psicoterapia humanista centrada en potenciar las capacidades de los usuarios y facilitarles soluciones.
En el año 1999 atravesé una profunda depresión que me llevó a replantearme cómo me estaba cuidando y de qué manera podía transformar la relación conmigo mismo.
Un año más tarde, en el 2000, empecé a asistir a sesiones de psicología y a participar en talleres de crecimiento personal, gracias al apoyo de un familiar. Ese fue el punto de partida de un gran camino: la psicoterapia y la terapia Gestalt.
Me inicié hacia mi mundo interior desde una mirada curiosa y llena de entusiasmo, hasta completar posteriormente mi formación como terapeuta Gestalt con un posgrado en Psicoterapia Infantil y de Adolescentes y un máster en Terapia de Pareja.
Me defino como una persona sensible, sensitiva e intuitiva, con una escucha atenta que crea un espacio de confianza y seguridad.
Me mueve la pasión por el crecimiento personal y el bienestar emocional, y mantengo una actitud abierta al aprendizaje constante que la vida nos aporta.
A lo largo de estos años he desarrollado un programa destinado a centros de salud, residencias y escuelas de primaria y secundaria, con el objetivo de promover la conciencia emocional, el desarrollo personal y la mejora de las relaciones sociales.
Durante mi infancia viví dos experiencias de cáncer —a los siete y a los doce años— que marcaron profundamente mi autoestima y mi crecimiento.
Esta vivencia la he compartido en mis talleres para sensibilizar sobre nuestro mundo emocional y ofrecer herramientas de gestión personal a través de una mirada vivencial y dinámicas grupales.
En los últimos años he centrado mi trabajo y formación en las terapias asistidas con animales, especialmente con personas mayores y con capacidades diversas, acompañándolas en situaciones de vulnerabilidad, soledad no deseada, estrés, ansiedad, etc.
Gracias a mi experiencia vital y a la formación en psicoterapia, he podido acompañar a muchas personas en su proceso de reencuentro personal, ayudándolas a reconocer su valor y a reconectar con la confianza en sí mismas.